El médico escucha cómo suena la voz de su hijo en diferentes tonos. El tono se refiere a la velocidad de las vibraciones de las cuerdas vocales: una voz de tono bajo vibra más lentamente y suena más profundo que una voz de tono alto. Su médico puede pedirle a su hijo que hable tanto en un tono alto como en un tono bajo para evaluar el estado de las cuerdas vocales.
Esta evaluación puede grabarse para que nuestros laringólogos y patólogos del habla puedan escuchar a la voz de su hijo con mayor detalle después del examen, lo que puede ayudar a identificar problemas específicos. La grabación también se puede usar como línea de base para monitorear el progreso del tratamiento.
Se puede usar un análisis de computadora de la grabación para obtener más detalles sobre la ronquera de su hijo.
Flexible o Laringoscopia transoral rígida
Su médico puede realizar una laringoscopia flexible al mismo tiempo que un examen vocal. Esta prueba le permite al médico observar las cuerdas vocales de su hijo para identificar quistes o nódulos.
Inmediatamente antes de la prueba, el médico rocía un anestésico tópico en la nariz de su hijo para adormecer los conductos nasales y la garganta. Una vez que el área está adormecida, el médico inserta un tubo delgado y flexible llamado laringoscopio flexible a través de una de las fosas nasales hasta la laringe. El laringoscopio está conectado a una pequeña cámara de alta definición, que le permite al médico ver las cuerdas vocales claramente en un monitor.
Durante la laringoscopia flexible, el médico puede pedirle a su hijo que repita ciertos sonidos y palabras para vea cómo funcionan las cuerdas vocales y la ubicación precisa del problema. Esta prueba se realiza en el consultorio del médico y toma aproximadamente dos minutos.
Se puede usar un laringoscopio transoral rígido, también realizado en el consultorio del médico, si su hijo tiene un tabique desviado o una obstrucción en las fosas nasales . Estas afecciones dificultan la inserción de un laringoscopio flexible a través de una fosa nasal.
Después de rociar un anestésico tópico en la garganta de su hijo, el médico inserta un laringoscopio delgado de metal a través de la boca hasta la laringe. La cámara de alta definición unida a la punta del laringoscopio muestra las cuerdas vocales en un monitor. La laringoscopia transoral rígida suele tardar dos minutos en realizarse.
Durante la laringoscopia transoral rígida o flexible, el médico puede utilizar una técnica llamada videoestroboscopia laríngea para buscar cicatrices y problemas estructurales en las cuerdas vocales. En la mayoría de las personas, las cuerdas vocales vibran entre 120 y 240 veces por segundo durante una conversación, mucho más rápido de lo que puede ver el ojo humano.
La estroboscopia utiliza destellos rápidos de luz de una luz estroboscópica conectada al laringoscopio. Esto le permite al médico observar las vibraciones de las cuerdas vocales en cámara lenta, revelando cambios sutiles en la estructura de las cuerdas vocales, como cicatrices u otros problemas. No agrega tiempo adicional al examen.
Microlaringoscopia y biopsia
Si los médicos necesitan observar más de cerca la laringe para evaluar las cicatrices que posiblemente estén ocultas por una lesión de las cuerdas vocales, pueden recomendar microlaringoscopia. Los médicos realizan este procedimiento quirúrgico, que dura aproximadamente una hora y requiere anestesia general, en el hospital.
El cirujano utiliza un laringoscopio para insertar un microscopio diminuto en la laringe de su hijo y levanta con cuidado la cuerda vocal para obtener una Vista muy ampliada de la zona. El médico también puede realizar una biopsia si es necesario, extrayendo un área diminuta de las cuerdas vocales, de modo que pueda examinarse con un microscopio para descartar cáncer.
Imágenes por resonancia magnética
El médico puede recomendar una resonancia magnética para determinar si la ronquera de su hijo es causada por un crecimiento en o cerca de uno de los nervios que conectan con los músculos de la laringe, lo que puede llevar a una parálisis parcial o completa de las cuerdas vocales.
Durante Se utilizan imágenes por resonancia magnética, un imán grande y ondas de radio para obtener imágenes detalladas y transversales de la laringe. Un anestesiólogo puede administrarle a su hijo un sedante de acción corta, administrado mediante una inyección en una vena, justo antes de que comience este procedimiento, para asegurarse de que permanezca quieto durante la prueba.
El médico usa los resultados de estas pruebas para crear un plan de tratamiento que aborde la causa subyacente de la ronquera de su hijo.