15 de abril de 2019
Forma de relación en todo el reino animal. ¡A veces estas relaciones crecen entre las parejas más inverosímiles! En el mundo animal, si la relación beneficia a ambas especies se conoce como relación simbiótica. Un ejemplo de simbiosis es la relación entre tiburones y peces rémora.
La rémora es un pez pequeño que suele medir entre uno y tres pies de largo. Sus aletas dorsales delanteras evolucionaron con el tiempo hasta convertirse en un órgano que se asienta como una ventosa en la parte superior de la cabeza. Este órgano permite que la rémora se adhiera a un tiburón que pasa, generalmente en el vientre o la parte inferior del tiburón. ¡A veces incluso se adhieren a ballenas, mantarrayas y al buceador ocasional!
La relación entre tiburones y rémoras beneficia a ambas especies. Las rémoras comen restos de presa que deja caer el tiburón. También se alimentan de parásitos en la piel y en la boca del tiburón. Esto hace feliz al tiburón porque los parásitos lo irritarían.
La rémora recibe más que una conveniente fuente de alimento; los tiburones los protegen de los depredadores y les dan transporte gratuito a través de los océanos. Las remoras mantienen las aguas limpias de restos alrededor del tiburón, evitando el desarrollo de organismos nocivos cerca del tiburón. El tiburón huésped también se mantiene limpio de parásitos irritantes que podrían afectar negativamente su salud. No confunda Remora con pez piloto, una especie que viaja con tiburones en una relación simbiótica similar. Los peces piloto nadan junto a los tiburones pero no se adhieren.
Los estudios muestran que muchas especies de tiburones parecen comprender los beneficios que tiene una rémora en su vida y bienestar. El comportamiento de los tiburones cambia en presencia de rémoras. Se ha observado que se ralentizan, incluso arriesgando su propia supervivencia, para permitir que las rémoras se adhieran.
Si bien la mayoría de las especies de tiburones aprecian las rémoras, ¡no todas están contentas con esta relación simbiótica! Se ha documentado que los tiburones de barra de arena y limón actúan agresivamente e incluso consumen remoras beneficiosas. A pesar de estos raros casos, la relación entre el tiburón y la rémora es una de las más firmes del océano, ¡y probablemente continuará durante el próximo millón de años!