No hay duda de que las papas fritas al horno caseras son más saludables. Estas papas fritas tienen solo 115 calorías por porción de 4 onzas, en comparación con 608 calorías para su contraparte frita. Y tienen menos de una décima parte de la grasa: 3 gramos por porción, en comparación con 39.24 gramos para la versión tradicional, según el USDA. Y, por supuesto, con esta receta puede controlar la cantidad de sodio.
Lo mejor de todo es que estas papas fritas horneadas caseras realmente saben mejor. Comerlas frescas del horno hará que sea difícil volver a la tienda -Comprado variedad. Con algunos consejos, usando el tipo correcto de papas, cortándolas en rodajas finas, remojándolas en agua y secándolas antes de hornearlas, puede asegurar papas fritas crujientes y deliciosas.
Las papas Russet son ideales para esta receta porque se doran muy bien debido a su contenido de almidón. (El 90% de las papas de Idaho son papas rojizas, por lo que si lo que compra se anuncia como «papas de Idaho», es probable que sean «re rojizas»). Sin embargo, si no puede encontrarlas, Yukon Golds funcionará muy bien también.
Una mandolina o un procesador de alimentos (el tamaño más delgado posible, generalmente 2 milímetros) es realmente lo que se necesita para cortar sus chips de manera fina y uniforme. La delgadez asegurará virutas crujientes y la uniformidad asegurará que algunas no se quemen prematuramente. Si no las tiene, no se preocupe. Solo tómate tu tiempo para cortar las papas.
Aunque no es una parte obligatoria de esta receta, remojar las papas en rodajas en agua fría durante 30 minutos ayudará a eliminar el exceso de almidón y Haga las patatas fritas más crujientes y deliciosas. Ya sea que elija remojarlas o no, asegúrese de secar todas las patatas fritas con una toalla de papel o de cocina antes de ponerlas en el horno. Este paso es clave para ayudar a que las patatas fritas estén crujientes.
Sírvelos con salsa de cebolla francesa fresca y cremosa, aderezo ranch o salsa de espinacas y alcachofas al horno. También puedes condimentarlos con una variedad de mezclas de especias, desde polvo tandoori hasta condimento para barbacoa a simple sal condimentada casera.