Debido a su apariencia, los médicos a veces diagnostican mal la papilomatosis vestibular como verrugas genitales.
Sin embargo, existen claras diferencias entre la papilomatosis vestibular y las verrugas genitales. Por ejemplo, la base individual de cada pápula de papilomatosis vestibular está separada, mientras que las verrugas tienden a unirse en la parte inferior.
En las mujeres, las verrugas genitales pueden desarrollarse en la vulva, el cuello uterino o el ano. La papilomatosis vestibular generalmente permanece confinada a la vulva, los labios menores internos y el introito vaginal, que es la abertura vaginal.
Aproximadamente 360,000 personas contraen verrugas genitales en los Estados Unidos cada año. Las verrugas genitales son pequeños crecimientos que aparecen en la piel alrededor de los genitales, incluida la vulva.
Son del color de la piel o blancas y pueden tener un aspecto similar a la papilomatosis vestibular en algunos casos. Las personas con verrugas genitales también pueden experimentar picazón o secreción inusual.
Ciertos tipos de infección por VPH causan verrugas genitales contagiosas. Pueden propagarse a través del contacto de piel a piel durante las relaciones sexuales. Las verrugas genitales no provienen del mismo tipo de VPH que tiene vínculos con el cáncer de cuello uterino.
Las verrugas genitales no son peligrosas y generalmente desaparecen por sí solas. Sin embargo, las personas a veces optan por el tratamiento si las verrugas son incómodas. Las verrugas también pueden presentar dificultades durante el parto, por lo que las mujeres embarazadas pueden desear buscar tratamiento.
El tratamiento de las verrugas también reduce la probabilidad de que una persona transmita el virus a otra durante las relaciones sexuales.
Las opciones de tratamiento para las verrugas genitales incluyen:
- eliminación química
- ungüento recetado
- crioterapia
- electrocauterio
- procedimiento de escisión electroquirúrgica con asa (LEEP)
Estos métodos son relativamente rápidos y no deberían causar dolor duradero. Sin embargo, no son necesarios en el caso de papilomatosis vestibular y pueden causar molestias innecesarias.