Los pollos son bastante resistentes y pueden tolerar temperaturas bajo cero, pero prefieren un clima más cálido. La temperatura ideal para los pollos es de 70 a 75 grados Fahrenheit. Durante el clima invernal, deberá tomar algunas precauciones para asegurarse de que sus pollos estén cómodos a pesar del frío.
The Best Temperaturas para gallinas adultas
Las gallinas prefieren temperaturas en los 70 grados, pero pueden soportar temperaturas mucho más bajas si es necesario. De hecho, las gallinas ponedoras pueden producir huevos incluso cuando las temperaturas ambientales bajan por debajo del punto de congelación. Aunque las gallinas puede tolerar temperaturas más frías, es importante mantener los gallineros calientes y secos durante todo el invierno para mejorar la postura y prevenir enfermedades.
Recuerde, a las gallinas les gusta el calor, ¡pero no el calor! Las temperaturas demasiado altas pueden resultar en la reducción del apetito, disminución de la producción de huevos y huevos de mala calidad. Si bien puede ser tentador aumentar la temperatura en todo el gallinero durante el invierno, es mejor proporcionar una sola fuente de calor, como una lámpara de calor o un calentador de cerámica. para que las gallinas puedan moverse libremente hacia o alejándose de la fuente de calor para regular su propia temperatura corporal.
Las mejores temperaturas para los polluelos
Los pollos son mucho más sensibles al frío que los pollos adultos debido a su pequeño tamaño y sus plumas inmaduras. Los pollitos son particularmente susceptibles al frío en sus primeros días de vida, y estar expuestos a temperaturas más frías durante este tiempo puede provocar enfermedades. Una buena regla general es comenzar con una temperatura ambiental de 90 a 95 grados Fahrenheit cuando los polluelos nacen y luego reducir la temperatura en 5 grados cada semana a medida que los polluelos crecen. Una vez que los pollitos alcanzan las 5 semanas de edad, se pueden mantener a una temperatura ambiental de 70 a 75 grados Fahrenheit.
Cómo mantener calientes a los pollos
Cuando las temperaturas bajan afuera, hay Hay varios pasos que puede seguir para mantener su gallinero cálido y acogedor para sus pájaros. Considere implementar algunas de estas estrategias para garantizar que sus pollos se mantengan calientes durante todo el invierno:
- Proporcione una fuente de calor, como una lámpara de calor o un calentador de cerámica.
- Llene el gallinero con ropa de cama adicional para el aislamiento.
- Use perchas con calefacción para ayudar a que las aves se mantengan calientes.
- Proporcione alimento adicional, lo que les dará a las aves más energía para producir calor corporal.
- Dele a las aves una almohadilla térmica para que se calienten según sea necesario.
- Mantenga a las gallinas activas proporcionándoles granos para raspar y otros elementos de enriquecimiento ambiental.
- Selle cualquier área con corrientes de aire del gallinero, sin dejar de mantener una ventilación adecuada para la salud de las aves.
- Use calentadores de agua para evitar que las fuentes de agua se congelen.
Asegúrese de controlar a sus pollos en todo momento durante el día, sobre todo por la tarde, cuando las temperaturas comienzan a bajar. Sabrá que sus pollos se sienten cómodos si están esparcidos por el gallinero y están activos y comiendo normalmente. Si los pollos están acurrucados o cerca de la fuente de calor, ¡su gallinero probablemente esté demasiado frío para ellos!
No hay reglas definitivas sobre qué temperatura es demasiado fría para los pollos. Los pollos pueden tolerar temperaturas bajo cero, pero mantener a los pollos calientes durante el invierno los ayudará a mantenerse saludables y productivos durante toda la temporada. Con algunas modificaciones simples en su gallinero , ¡no tendrá que preocuparse por sus pollos en el frío!
{{widget type = «cms / widget_block» template = «cms / widget / static_block / default.phtml» block_id = «119»}}